Necesita practicar ejercicio de modo continuo ya que es una raza de trabajo. Los pastores alemanes destacan en deportes como el schutzhund, que es una buena alternativa para ayudar a mantenerlo sano y equilibrado tanto física como psíquicamente. Las salidas al campo, playa o montaña son necesarias y recomendables sobre todo si se le permite correr a su antojo al menos dos veces al mes.
Así, su fuerte musculatura se mantendrá en forma y se contribuirá a preservar su equilibrio psíquico, siendo una raza especialmente predispuesta a padecer trastornos temperamentales que en casos extremos degeneran en neurosis. Se prefiere a los 3 meses de vida realizar su primer baño, en un lugar cálido, donde el perro no corra riesgo de lastimarse, utilizando jabón o champú neutro.
Sea que se le alimente con pienso de buena calidad o con Dieta BARF es importante que se tenga especial precaución de evitar la sobrealimentación ya que posee un apetito voraz que lo puede llevar a padecer problemas gástricos, que, mal tratados, degeneran en diarrea crónica.
Es recomendable acudir al veterinario al menos una vez al año para un chequeo general.
El cepillado diario es necesario para evitar que el pelo muerto cuelgue de sus extremidades y cuello, esto también permite que su pelaje se conserve brillante, saludable y hermoso.
Cuidados Específicos
No es un perro adecuado para vivir dentro de casa pero es muy adaptable y puede llegar a acostumbrarse a la vida de interior.
De todos modos, el Pastor Alemán requiere largos paseos diarios para quemar todas sus energías y es recomendable proporcionarle sesiones de juego para que se sienta útil.
Salud
Los pastores alemanes tienen una esperanza de vida de entre 10 y 12 años. Hay que vigilar su calendario de vacunación puesto que son susceptibles de contraer moquillo. Como es común en perros grandes, esta raza es susceptible también de padecer displasia de cadera.
La cruza responsable es necesaria para evitar que este tipo de defectos se propaguen de generación en generación para tener ejemplares sanos que no sufran dolor y sean útiles para el trabajo.
Esta raza requiere normalmente que las caderas de los cachorros sean pasadas por rayos-X, y que las radiografías sean certificadas y aprobadas por los clubes responsables de la raza (el organismo que regula a esta raza es el Verein für Deutsche Schäferhunde e.V. (SV) con sede en Augsburgo, Alemania), cuando el cachorro alcance la madurez (aproximadamente a los 2 años de edad), para que así se cuente con un adulto apto para la reproducción.
Otras enfermedades que se pueden presentar son:
- Panosteitis: formación, crecimiento e inflamación excesivo de hueso alrededor de las articulaciones provocando en los como “cojera del cachorro” (definición dada por la enciclopedia del AKC).
- Síndrome de cauda equina: signos neurálgicos resultantes de la compresión de los nervios de la espina en la región lumbosacra.
- Pannus corneal canino (queratitis crónica superficial): inflamación de la córnea que puede producir ceguera potencial, incluyendo un crecimiento anormal del tejido alrededor de la córnea.
Salud y Enfermedades Hereditarias
Sin ejercicio y actividad regulares, la raza es ante todo susceptible al reumatismo, cuyos síntomas son similares a los humanos: hinchazón y rigidez de las articulaciones afectadas y dolor en el movimiento. Debido a que algunos de los síntomas de esta enfermedad son compartidos por la mucho más grave displasia de cadera, es necesaria una atención profesional inmediata cuando se manifieste por primera vez.
Los problemas de piel también son frecuentes en la raza. El rascado lento y constante, en oposición con el breve estallido de rascado a causa de las pulgas, es señal de problemas dérmicos. Si se observan precozmente, la mayoría de estos problemas pueden reducirse rápidamente con cuidados veterinarios y dieta.
Otras enfermedades que pueden presentarse en los Pastores Alemanes no son exclusivas de la raza, sino que son compartidas con otras de diversos tipos. Por ejemplo, debido a que el Pastor Alemán es una raza grande, se ve afectado por osteocondritis disecante, panosteítis, osteodistrofia hipertrófica y miastenia grave, todas ellas enfermedades óseas.
Debido a su naturaleza de pastor, es propenso a enfermedades de los ojos típicas de este tipo de perros, tales como ojos del Collie, pannus, cataratas y displasia de retina.
La epilepsia es otra enfermedad que afecta a los perros pastores. Las enfermedades de la sangre, como la enfermedad de Von Willebrand y la hemofilia A, y los problemas cardiacos, tales como el conducto arterioso persistente y el arco aórtico derecho persistente, son problemas que afectan a la mayor parte de perros, y el Pastor Alemán no está excluido.
Ningún examen referente a la salud del Pastor Alemán puede acabar, sin embargo, sin hacer clara referencia a la displasia de cadera.
El argumento de que la raza más popular y excesivamente criada de perros debe también presentar más casos de esta enfermedad hereditaria, no ayuda nada a mejorar ese dato.
Los perros displásticos han desarrollado incorrectamente las articulaciones de la cadera, y están propensos a artritis y fuertes dolores. Estos perros son incapaces de trabajar o incluso moverse sin grandes dificultades.
Los criadores y los cirujanos veterinarios continúan estudiando esta enfermedad y la protección contra ella, pero es responsabilidad de todo dueño potencial de Pastor Alemán informarse sobre si los padres y los abuelos de su animal tenían caderas calificadas como buenas o mejores.
Es posible que parte de la predisposición de la raza a esta enfermedad haya sido causada por la exageración inicial de los criadores de la poderosa curva hacia abajo de la postura de los animales. Si eso es cierto, es triste que el carácter irreductible, básicamente invariable, de esta noble raza deba ligarse a esta deficiencia, fomentada inadvertidamente por sus primeros y más afectuosos forjadores.
Recientemente también se han presentado casos de displasia de codo, y se han establecido los criterios para identificarla. La mejor prevención de los problemas físicos genéticos de la raza se logra con una minuciosa planificación y con el máximo cuidado en la elección y la selección del criador y del animal.
Aunque la lista de enfermedades congénitas a las cuales son propensos los Pastores Alemanes asuste un poco, la verdad es que la mayoría de representantes de la raza están sanos. Muchos Pastores Alemanes pueden vivir perfectamente más de diez años, y se sabe de algunos que han sobrepasado notablemente esa edad.
Dado que es por naturaleza un perro de trabajo activo, la buena salud es una necesidad absoluta para todos los miembros de la raza. Cuando vaya a seleccionar a su cachorro de Pastor Alemán, no compre por comodidad y no pretenda ahorrar.
Un Pastor Alemán bien criado, con genealogía de calidad (líneas que se hayan verificado libres de problemas hereditarios durante generaciones) es la elección óptima. Incluso aunque un Pastor Alemán con sólo displasia leve pueda llevar todavía una vida normal, nadie desea ver a su mejor amigo comprometido de cualquier modo.
La autora recomienda encarecidamente que los dueños investiguen a fondo a sus cachorros antes de la compra, para que luego no se les destroce el corazón por haber adoptado a un perro precioso con graves problemas de salud.